Ha sido una de las novedades que más ha llamado la atención en el reciente Salón de Ginebra 2019. Porque con el curioso y divertido ID. Buggy, Volkswagen traslada el legendario buggy de los años 60 y 70 a la era de la movilidad eléctrica.
El Dune Buggy original era un vehículo lúdico que los aficionados y empresas independientes fabricaban a partir de una transformación del mítico “Escarabajo”. Ahora, Volkswagen resucita aquel espíritu aventurero para dar a conocer la versatilidad de su plataforma modular de propulsión eléctrica MEB. Y nos demuestra que la movilidad eléctrica no está reñida con la diversión al volante.
El Volkswagen ID. Buggy cuenta con un motor eléctrico situado en el eje trasero con una potencia de 150 kW y alimentado por una batería de iones de litio con 62 kWh. La autonomía del conjunto está estimada en unos 250 kilómetros (según ciclo WLTP) y acelera de 0 a 100 km/h en 7,2 segundos. Dado el enfoque lúdico del ID. Buggy, se ha prescindido de los asistentes a la conducción para permitir el disfrute total del conductor.
Por el momento, este prototipo carece de tracción total. Sin embargo, la plataforma modular MEB permite añadir fácilmente un segundo motor eléctrico en el eje anterior para convertirlo en 4×4, algo que podría ocurrir cuando conozcamos su versión definitiva.
El diseño del ID. Buggy es una versión moderna del clásico Buggy playero de décadas pasadas. El prototipo carece de puertas y techo y la parrilla prácticamente no existe. Los abultados pasos de rueda esconden unas ruedas All-Terrain listas para afrontar cualquier terreno. Remata la zaga un paragolpes similar al anterior, con el mismo protector para los bajos. Las barras anti vuelco, la estructura y un parabrisas reforzado brindan protección adicional en caso de vuelco.
El conjunto resulta agresivo pero armonioso, y se ve realzado por el tono jovial de su carrocería e interior en color Fern Green.
El Volkswagen ID. Buggy está configurado para acoger a dos ocupantes, aunque podrían añadirse dos asientos más. Su interior es minimalista, con apenas una instrumentación digital tras el volante y los selectores del cambio en el túnel central. Además, sus materiales son impermeables y resistentes a las inclemencias del tiempo.
Pronto sabremos si el ID. Buggy es solo la primera versión de un vehículo de producción que seguiría ampliando la gama eléctrica de Volkswagen.