Los vehículos Audi g-tron combinan de manera inteligente tecnologías ya acreditadas con combustibles alternativos, demostrando que la tecnología es compatible con la sostenibilidad y la movilidad del futuro. Unos depósitos ligeros de alta presión, situados detrás del depósito de gasolina, con Gas Natural Comprimido (GNC) almacenado a 200 bares, se combinan con un motor TFSI cuyos componentes han sido adaptados a las propiedades del gas natural.
Con el modo GNC activo, un Audi g-tron es capaz de recorrer hasta 500 kilómetros con un consumo muy reducido, entre 3,2 y 3,3 kg de GNC a los 100 km, y unas emisiones de CO2 entre un 25 y un 30% menores que un motor de gasolina. Por su parte, en el modo convencional de circulación donde actúan los depósitos de gas natural junto con el motor TFSI, la autonomía alcanza los 1.300 km.
Su magnífica eficiencia y una autonomía que permite cubrir la distancia existente entre Copenhague y Berna o Berlín y Le Mans, hacen que el conductor no perciba ningún cambio cuando el sistema pasa a funcionar en TFSI, hecho que se produce cuando la presión baja de los 10 bares.
La tecnología Audi g-tron se acompaña del proyecto Audi e-gas, que tiene como objetivo lograr una movilidad con emisiones de CO2 reducidas. El Audi e-gas se consigue utilizando recursos renovables de forma exclusiva, combinando hidrógeno (obtenido de la energía eólica) con CO2 del gas de escape de una planta de biometano, que trabaja con residuos orgánicos. Se consigue un combustible, parecido al gas natural fósil, que es compatible con el medio ambiente.
Dentro de la gama Audi g-tron, con distintivo ECO por sus bajas emisiones, la marca alemana acaba de lanzar dos nuevos modelos, el Audi A4 Avant g-tron y el Audi A5 Sportback g-tron.
Ambos modelos cuentan con un motor TFSI de 2.0 litros que genera una potencia de 170 CV y un par motor de 270 Nm, junto a unos depósitos con capacidad para 19 kilos de gas natural que permiten recorrer 500 km. El depósito de gasolina de 25 litros permite que la autonomía total sea de 900 km.
Espacio, elegancia y deportividad se combinan en el nuevo Audi A4 Avant g-tron. Estética y funcionalidad, junto a los más actuales sistemas de asistencia inteligente, para crear un vehículo innovador que está preparado para el día a día.
Por su parte, el Audi A5 Sportback g-tron añade, a su estética deportiva y sus excelentes prestaciones, una movilidad que respeta al medio ambiente.
Por su parte, el Audi A3 Sportback g-tron fue el primer vehículo de la marca en utilizar esta tecnología. Un automóvil con carácter deportivo y esbelto, reforzado por sus líneas laterales, las líneas en relieve de la parte trasera o sus faros traseros LED tridimensionales.
Con un motor TFSI de 1.4 litros y unos tanques que almacenan 14 kilos de gas natural, el Audi A3 Sportback g-tron cuenta con 110 CV de potencia y 200 Nm de par motor. El gas natural permite una autonomía de 400 km y, los 50 litros del depósito de gasolina, elevan la autonomía total a los 1.300 km.